¡Bienvenido! Esta web es la puerta de tu consciencia para vencer al acoso laboral

Lo único que diferencia a unas empresas de otras son las personas que trabajan en ellas.

Todas las empresas tienen la posibilidad y el acceso a la misma maquinaria, a la misma tecnología, a los mismos proveedores… Siempre ha sido así, pero la globalización ha hecho de esto una auténtica realidad.

Por eso, lo único que realmente diferencia a una empresa de otra son las personas que trabajan en ella. De ahí la importancia de disponer del mejor equipo humano para poder así marcar la diferencia.

Para tener el mejor equipo humano es importante la consideración que se tenga de la empresa dentro y fuera de ella. Esto es lo que se denomina ahora “employer branding” (la marca del empleador). De ese employer branding va a depender la incorporación del verdadero talento. Si la empresa no es atractiva para este tipo de perfil, jamás dispondrá de él, por tanto jamás optará a los mejores candidatos para marcar la diferencia con sus verdaderos competidores.

Antes no había información sobre las empresas, solo se sabían cómo eran cuando ya estabas dentro. Pero hoy en día eso no es así, hoy en día se sabe todo. Las redes sociales por ejemplo han conectado a las personas de tal modo que seguro que una empresa de la que quieres alguna referencia, siempre hay alguien que conoce a alguien que te puede dar dichas referencias. Si tu empresa no es atractiva jamás optarás al talento. Nunca olvides que es el talento el que elige donde quiere trabajar y no al contrario.

Por eso y volviendo a la reflexión que daba título a este post, sabiendo que lo único que te va a diferenciar de tus empresas competidoras son las personas que trabajan en una y otra… Debería hacerme las siguientes preguntas; ¿Qué hago como empresa para tener el mejor capital humano? ¿Mi empresa es atractiva para la incorporación de talento?

Sé que hay empresarios y directivos que no encuentran ningún interés en esto que estamos hablando. Hay que respétalo, pero tienen que ser consciente entonces de sus limitaciones y de sus posibilidades.

Si hacemos el símil de tu equipo de trabajo en tu empresa, con un equipo deportivo, debemos saber que si tienes jugadores con limitaciones técnicas y físicas, no se puede optar a ganar la liga. Serás un equipo que lucha por la permanencia, con mucho esfuerzo, con mucho sufrimiento y con lo que es peor, ningún éxito asegurado.

Sé que los detractores de lo que estoy exponiendo en estos momentos se agarran al argumento de “¿cuánto cuesta un equipo talentoso?”, Su corta creatividad entre otras cosas no les permite ver más allá. Pero siento decir que disponer de talento no depende principalmente de dinero. La cultura empresarial, el clima laboral, el modelo de dirección y muchas otras causas gratuitas y no el dinero son lo que hace al talento sentirse seducido por un trabajo. Las personas no dejan los trabajos por lo que ganan, lo dejan normalmente por los jefes y por el clima laboral que tienen.

Lo que hace grande a tu empresa son tus clientes, y quieras o no, estos los dejas en manos de tu equipo. Por eso como dice acertadamente Richard Branson “cuida de tus empleados para que ellos cuiden de tus clientes.”

Y tu… ¿como cuidas de tus empleados?

Intenta tomar consciencia de cual es la situación actual de tu empresa, si estás en la posición de poder cambiar algo, ¡hazlo! es tu responsabilidad. En este post como todo los que publico se pretende, una vez más, agitar conciencias para propiciar el cambio. Haz lo que esté en tu mano por cambiar aquello que pueda mejorar el interés general.